TEGUCIGALPA>> La embajada de España en Honduras, con ocasión de la celebración de la Fiesta Nacional de España, ofreció una fina recepción el 12 de octubre, en el hotel Real InterContinental de esta capital.
Asistieron la designada presidencial Doris Gutierrez, el presidente del Congreso Nacional Luis Redondo, funcionarios del gobierno, diputados, cancillería, ministros, miembros del cuerpo diplomático, organismos internacionales, académicos, empresarios, políticos, reconocidas figuras de la sociedad capitalina, ciudadanos españoles radicados en Honduras y otros invitados especiales.
Durante su discurso, Baltasar Fernández, segunda Jefatura de la embajada de España, excusó la ausencia del embajador Diego Nuño García, que por motivos personales no pudo estar presente en la magna celebración.
“Después casi 15 meses en el país, y aunque todavía me considero un recién llegado, no puedo más que referirme a las bondades de Honduras y su pueblo”, comenzó manifestando Fernández.
“Gracias a la Cooperación Española, he podido viajar por el país y no he dejado de conocer lugares y parajes de enorme belleza. Honduras es, sin duda, un país con extraordinarios recursos, con una cultura de enorme riqueza, pueblo afectuoso y con un enorme potencial para lograr lo que se proponga”.
“Nuestra relación está impregnada de un acervo común de valores, historia y de intereses y necesidades compartidos, sobre todo en un mundo tan interdependiente como el actual, prueba de lo anterior son nuestras muy positivas relaciones políticas”, apuntó el diplomático.
“Como bien saben, la cooperación es uno de los pilares más importantes sobre los que se cimienta nuestra relación. En este sentido, quiero recordar que nuestra Oficina de Cooperación abrió sus puertas por primera vez en 1981, y desde entonces, no hemos dejado de trabajar arduamente por un Honduras más próspero y con más oportunidades”.
“Nuestra cooperación trabaja siempre en circunstancias complejas, en zonas de riesgo, atendiendo a los problemas de los más vulnerables y llegando a lugares recónditos en todos y cada uno de los departamentos de Honduras y se caracteriza por no ser condicionada. No buscamos influir políticamente, así lo hemos hecho en momentos tan críticos como el Mitch, la pandemia de Covid-19 o las tormentas Eta e lota”, indicó Fernández.
“Hoy son cada día más los hondureños que emprenden el viaje a la inversa. Son al menos 150.000 hondureños los que residen en nuestro país, y probablemente más en la práctica, con un aumento anual constante desde 2005”.
“Aunque a menudo la inmigración oculta historias indeseables, lo cierto es que los hondureños que residen en nuestro país lo hacen, en general, de modo ejemplar y con un alto grado de integración social. Contribuyen a nuestra economía, pero también apoyan a sus familias en origen. No en vano, el 13% de las remesas que recibe Honduras, proceden de España”, aseguró.
“Considero también que las empresas de Honduras tienen margen para aumentar sus exportaciones a España. Algunos de sus más excelentes productos como el café o el cacao no tienen el reconocimiento y fama que debieran en nuestro país, señaló ente otras cosas.
Baltasar Fernández, expresó su agradecimiento a todo el equipo de la embajada por su compromiso diario y su profesionalidad, incluyendo a todo el personal de la Oficina de Cooperación, de la Oficina Comercial y en el Centro Cultural de España en Tegucigalpa, referente indiscutible de la escena cultural de esta capital.
También felicitó especialmente a los cinco miembros de la Guardia Civil destacados en la sede diplomática, así como a todos los patrocinadores por sus contribuciones para que la celebración fuera un éxito.
Luego de los respectivos actos protocolarios y incluyendo el tradicional el brindis de honor, los asistentes pasaron a disfrutar la celebración con el sabor especial de los platillos y bebidas de la tradicional gastronomía española.
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